Darius Sasnauskas, un aventurero lituano, fue testigo del nacimiento de dos ciervos en su patio trasero cerca del parque nacional de Yellowstone en E.E.U.U. Desgraciadamente, uno de los recién nacidos fue herido y pronto su familia le dejó porque la pequeña no podía seguirles.
“Con tantos depredadores alrededor, ella no tenía ninguna posibilidad de sobrevivir sola,” dice Darius en su video. Así que decidió llevarla a su casa. “No apoyo el hecho de criar animales salvajes como mascotas, pero esta era una situación excepcional,” dice.
Después de mucho trabajo duro, la cierva se curó y por fin vino el momento de soltarla en libertad. Sin embargo, la relación entre ella y Darius era tan fuerte, que la pequeña siempre volvía. Pero una tarde muy especial, ella, finalmente, se reunió con su familia.
Darius fue testigo del nacimiento de dos ciervos en su patio trasero, pero, desgraciadamente, uno de ellos tenía una pata herida
Ella no podía seguir su familia y fue abandonada, su madre nunca volvió
“Con tantos depredadores alrededor, ella no tenía ninguna posibilidad de sobrevivir sola,” dijo Darius
Él llevó la pequeña a su casa y le hizo un refuerzo para la pata con una caja de harina de avena
Darius le daba comer cada 4 horas y su perro lamía repetidamente la cara de la cervatilla
Pronto la pequeña aprendió a andar otra vez
“Ella ahora está acostumbrada conmigo y me sigue…, pero nadie puede sustituir su verdadera madre”
Darius intentó liberarla muchas veces, pero ella siempre volvía
Finalmente, una tarde su madre apareció otra vez y la cierva se reunió con su familia; después de unos meses Darius la vio creciendo rápido y disfrutando plenamente su vida
