Ubicado en un palacio perteneciente a la familia de los Marqueses de Santa Cruz, en el pueblo de El Viso, provincia de Ciudad Real, fue mandado construir por Don Álvaro de Bazán, primer Marqués de Santa Cruz, en el año 1562.
La tradición habla de las razones que llevaron a tan insigne marino a edificar un palacio en plena Mancha, haciendo referencia a que se trataba de un punto estratégico equidistante de los puertos apostaderos de sus flotas de galeras, el Puerto de Santa María (Cádiz), Cartagena y Lisboa. Pero resulta casi inevitable referirse al famoso y viejo aforismo que el cantar popular patentizó en la contundente frase:» El Marqués de Santa Cruz hizo un palacio en el Viso, porque pudo y porque quiso».
Se trata de un magnífico palacio de estilo arquitectónico propio del siglo quince, con unos ocho mil metros cuadrados de pinturas al fresco. Constituye el conjunto pictórico español en el que mejor se encuentra representada la mitología clásica, así como las pinturas de carácter épico narrativo, de historia romana, de linajes, religiosa, escenas de caza y principalmente, escenas de batallas navales.
Con el fin de perpetuar y ensalzar la figura del invicto General, los herederos del título ofrecieron a la Armada el palacio con el objeto de instalar en su interior un archivo-museo que llevase el nombre de ese ilustre personaje que tantas glorias dio a España.
Se autorizó tal ofrecimiento, firmándose en 1949 un contrato entre los Marqueses de Santa Cruz y los representantes de la Armada, marcando una duración del contrato por noventa años con un precio del arrendamiento de una peseta pagadera por años vencidos.
Desde entonces la Armada ha venido encargándose de su decoración y mantenimiento, llegando a convertir, con un desmesurado esfuerzo, un viejo palacio abandonado y deteriorado por las numerosas y variadas vicisitudes que sufrió en su larga vida, en una hermosa joya del patrimonio, visitada y admirada por numeroso público.
El Archivo-Museo está integrado en la red de Museos Periféricos del Museo Naval de Madrid. En alguna de sus salas se pueden contemplar diversas piezas, modelos navales, cuadros, armas e instrumentos relacionados con la Historia y Cultura Naval, si bien, es la propia estructura artística del palacio la que da el tono de auténtico Museo.
Resaltan ocho pinturas, distribuidas a lo largo de la galería alta y baja, que representan escenas de combates navales, todos ellos de campañas llevadas a cabo por D. Alvaro de Bazán en las que obtuvo éxitos notables. En la parte superior de cada una figuran la representación de una ciudad así como lunetos con leyendas en que se narran las campañas navales. Además, el Palacio alberga el archivo General de la Marina, una especie de » Simancas Naval «, archivo histórico de la Armada Española.
Es una interesantísima fuente de información, con un contenido documental de más de dieciséis kilómetros de legajos. Dispone de Sala de investigación frecuentada por numerosos investigadores nacionales y extranjeros y una pequeña biblioteca.
Fuentes: