Visitar 10 Corso Como en Milán es una obligación en cualquier escapada un poco digna a la capital lombarda. Se trata de un espacio multi-cultural que lleva abierto la friolera de 20 años y que ofrece hotel, restaurante, boutique, galería de arte, bookshop y un ambiente de lo más chic que se puede disfrutar en la ciudad.
Para los que no lo conozcan podemos calificarlo de auténtico rincón secreto, pero se nos hace complicado valorarlo así por la gran repercusión mediática que ha tenido durante sus años de existencia.
Como referente más cercano podría compararse a la bonita tienda parisina llamada Collete, ya que podrían ser primas hermanas, cada una de ellas con su diferente personalidad.
Mientras que, en las estanterías de su rincón de moda, podemos encontrar lo último y más exclusivo de cualquier diseñador de prestigio en el mundo.
En la planta superior se pueden disfrutar de maravillosas obras de arte expuestas en la galería de Carla Sozzani tanto con carácter permanente como temporales.
Es un lugar mágico donde puedes ir a inmolarte con tu tarjeta de crédito o simplemente escaparte a dar una vuelta, leer un libro y disfrutar de un maravilloso cappuccino en su patio interior.
Se encuentra situada en un barrio bohemio de la zona norte de la capital llamada Porta Garibaldi pero no demasiado lejos del centro (unos 20 minutos caminando). De hecho, se puede ir dando un pequeño paseo desde el barrio de Brera, probablemente el más trendy y divertido que haya en estos días en la ciudad.
A pesar de ser un concepto de tienda con gran personalidad y que es necesario conocerla para hacerse una idea de la misma, existe la posibilidad de comprar muchos de sus artículos vía web y han desarrollado un gran portal de comercio electrónico. La verdad es que nos alegramos mucho de ello, así como de que hayan exportado este concepto a lugares como Seúl o Tokyo.
Se accede desde una calle peatonal tan típica en Milán como cualquier otra y la fachada exterior nada hace presagiar el gran espacio interior cercano a los 1.000 m2 que ocupan sus diferentes estancias.
En primer lugar, nos encontramos la terraza o patio interior del restaurante que ya ofrece algo especial desde el primer momento. Quizás sea la disposición de las mesas, quizás sea por la vegetación interior con varios pajarillos volando o quizás sea por lo que uno espera encontrarse después, pero sea por lo que fuera, la primera impresión ya es excitante desde cualquier punto de vista.
10 Corso Como también es un buen lugar para tomar el famoso aperitivo milanés. Ya lo hemos comentado en algún post anterior, pero si no lo habéis leído, tan sólo repetimos unas breves líneas para comentar lo que es.
La costumbre es tomarse una copa de vino o una cerveza o un cóctel y en los lugares donde lo ofrecen luego hay una especie de barra libre de comida que incluye frutos secos, pequeñas raciones o montaditos, ensaladas e incluso más cosas hasta tal punto que en algunos sitios podría servir incluso de cena.
En el restaurante también se puede cenar y sirven algo de comer en cualquier momento del día.
Luego, también comentar que el Hotel tan sólo ofrece tres habitaciones, pero cabe advertir que es más difícil reservar que conseguir una suite en el Hotel Armani en la Semana de Moda de Milán (Milán Fashion Week).
Aunque parezca extraño en un lugar tan excéntrico, local incluyendo su pequeño hotel, es pet friendly, con lo cual pueden acompañarnos dentro de sus instalaciones y especificamente perros de menor tamaño para el hotel.
En la planta baja se encuentra la tienda propiamente dicha donde todo está unido con un desorden tremendamente ordenado y donde la iluminación y los detalles cobran vida propia.
Podemos encontrar libros, cuadros, elementos decorativos para los hogares, maletas, perfumes, joyas, ropa, zapatos, complementos y un sinfín de curiosidades que marcan o van a marcar tendencia los próximos años. La gran mayoría de sus artículos son propios de marcas muy consagradas.
Fuentes:
Opiniones