Este parque está ubicado en Medellín en la antigua plaza de Cisneros, la que es hoy el Parque de la Luz, al que 300 enormes postes luminosos, 2.100 reflectores y 170 lámparas de piso lo convierten en un moderno espacio público.
En el sistema español, las plazas principales contenían en su marco los diversos poderes: religioso, económico y político. Emblemas primordiales fueron en el interior de las mismas, el templo, el cabildo, la oficina de rentas, etc.
Se generaba, además, la venta de los productos agrícolas y mercaderías diversas; eran plazas de mercado público.1 En Medellín se presentaron importantes cambios, cuando se reubicaron algunas de las funciones de la plaza principal (hoy Parque Berrío), a las plazas de mercado cubiertas.
Debe tenerse en cuenta que, a finales del siglo XIX, cuando las guerras civiles habían sido frecuentes, la naciente burguesía, compuesta por comerciantes y mineros, se iniciaban en las sociedades bancarias, buscando la manera de asegurar sus capitales, y hallaron en la adquisición y evolución del negocio de tierras una de las formas más viables, no sólo de proteger y garantizar su seguridad económica, sino de multiplicar sus ingresos.
Se le conoce popularmente, es una plaza ubicada en la ciudad colombiana de Medellín, nombrada así en homenaje al ingeniero cubano Francisco Javier Cisneros precursor del Ferrocarril de Antioquia. La plaza se localiza entre la Biblioteca EPM, los Edificios Vásquez y Carre y la Estación del Ferrocarril.
Cuenta con un bosque de postes luminosos de hasta 24 metros de altura; se trata de 300 postes con 2.100 reflectores (siete por torre) y 170 lámparas de piso. Estos elementos se mezclan, a su vez, con bambú, y fuentes de agua. Es una especie de bosque artificial, con espacios claros destinados al encuentro y concentraciones masivas.
Espacio en el cual se desarrollan distintas actividades como lo son las ventas ya sea las que se hacen cada mes que constan de toldos en los cuales venden comida, accesorios y distintos medios de entretenimiento, o las ambulantes que podemos encontrar todos los días.
La Biblioteca EPM, inaugurada el 2 de junio de 2005, es una clara expresión de la proyección social de esta gran empresa antioqueña, de su capacidad para contribuir al progreso de la comunidad a partir del apoyo a la cultura, la educación, el conocimiento y el fomento al uso eficiente de los servicios públicos domiciliarios.
Diseñada en forma de «pirámide del conocimiento», la Biblioteca EPM parte de lo general en sus primeros pisos, hacia lo específico en sus niveles superiores; distribuidos internamente en cuatro niveles y un semisótano.
Ciencia, industria, medio ambiente y tecnología son las áreas de especialidad de la Biblioteca EPM, única en el medio por ser especializada y permitir el libre acceso al público en general, propiciando el desarrollo científico, tecnológico y empresarial de la ciudad y de la región.
Desde luego, esta especialización no significa que el material disponible no esté al alcance de todos los públicos, pues por su misma concepción piramidal el acceso al conocimiento y a las fuentes de información va desde lo más elemental hasta las áreas de mayor especialización.
La Biblioteca EPM es un complemento de gran valor para las bibliotecas públicas, no solo por cubrir una carencia, sino también por la labor que desarrollará en los procesos de formación de hábitos investigativos y por la recopilación y divulgación de un conocimiento específico puesto a disposición de toda la comunidad.
Fuentes: